Sólo estrictamente frescos deben ser usados. Freír cada uno a la vez, en grasa profunda. no demasiado caliente. La clara debe permanecer lisa, casi como un huevo escalfado en agua.
Freír en grasas profundas o aceite que debe estar muy caliente. La clara del huevo se hincha y se dora un poco en el borde.
Haga una salsa de tomate, más o menos una pequeña taza de caldo (cebolla picada dorada, tomates y un poco de pimiento verde); agregue algunos pimientos rojos dulces españoles picados, espese con un par de yemas de huevo. Pon la salsa en un plato plano.
Abra en la salsa la cantidad de huevos crudos necesarios agregue perejil picado, un poco de sal, salpique con mantequilla y ponga en el horno hasta que esté listo.
Se utilizan panecillos redondos para el desayuno en este plato popular.
Corte un disco pequeño de la parte superior del panecillo. Extraiga la parte blanda de la masa dejando sólo la cáscara. Ponga en una cucharada de casi cualquier relleno deseado: carne picada, jamón o pollo, petits pois, salsa de crema y queso, etc. Luego coloque un huevo crudo en el relleno, vierta sobre él un poco de salsa de tomate o crema y un trozo de mantequilla. Cubra con la pieza cortada desde la parte superior del panecillo. Otro pedacito de mantequilla y poner en el horno hasta que el huevo esté listo.
Servido en platos individuales.
Haga una rica salsa de tomate (cebolla dorada en mantequilla, laurel, clavo, sal), pimiento verde picado y una docena de tomates) colar; incluya aproximadamente media rebanada de jamón por cada porción; corte el jamón en trozos y agréguelo a la salsa.
Ponga un trozo de mantequilla en cada plato. un poco de la salsa y uno o dos huevos según el gusto y la importancia que uno quiera darle al plato. Luego un poco más de la salsa. Rodee los huevos con guisantes, judías verdes, puntas de espárragos, camarones y aceitunas.
Poner en el horno hasta que los huevos estén listos y servir.
Dorar en un poco de grasa o mantequilla una cebolla picada, tres tomates grandes cortados, habiendo eliminado previamente la piel y las semillas, un pimiento verde, picado; perejil, sal y pimienta al gusto. Mientras se cocinan estos ingredientes, agregue un cuarto de lata de arvejas finas (petits pois), luego seis huevos bien batidos con una cucharada de mantequilla y revuelva sobre el fuego. Los huevos deben estar bien revueltos. En Cuba los preferimos más bien secos que demasiado blandos.
Seis huevos, bien batidos, tres cucharadas de leche, sal y pimienta.
Ponga dos onzas de mantequilla en una sartén; caliente; agregue la mezcla de huevo y un momento antes de que esté listo, agregue la mitad de un aguacate, cortado en cubitos.