Adiós Lolita de mi vida. Lola en la cultura

Alejandro Cernuda



Lola es el símbolo. Lolita es un arrebato sensual que ha trascendido de una manera poco común las fronteras, en apariencias sin tocarse. De adulta Lola se ramifica en muchos avatares. Y no se puede hablar de Lolita sin Nabokov. Él no ha sido el único creador y el símbolo y el nombre son anteriores. Pretendamos entonces un mínimo estudio de la geografía sensual asociada a una Lola genérica y habitante ubicua de varios lugares.

Lola Puñales

Todas las Lolas son bellas; la de España, Lola Puñales, quien “aunque no quiere dolores mata de amores a los mejores y más cabales” Así dice la copla que Quintero, León y Quiroga compusieron para Conchita Piquer… Como su vida y hechos se conocen bien, hagamos un poco de historia. María de los Dolores León nació en un pueblo de la provincia de Córdova allá por el año 1870. Tuvo que marcharse del pueblo luego de estar en boca el rumor de haber perdido la virginidad con un joven hijo de ricos –sean los hijos uno de los peores engendros de la gente rica-.

Lola puñales

Dibujo que representa Lola Puñales

Se fue a Sevilla, donde comenzó a ganarse la vida bailando y cantando, prostituyéndose y otras labores artísticas. Si algo había sacado Lola a cambio de “la rosa de sus rosales” llámese virginidad, fue una sutil gracia para el desprecio de los hombres. Logró con sinsabores más belleza que algunos gastaran bastante con tal de perpetuarse bajo sus faldas. Hasta ahí iba bien, pero “Sin saber cómo ni cuándo tú te vas a enamorar. Con el fuego estás jugando y te tienes que quemar” predice la copla de Quintero, León y Quiroga; y así fue a partir del próximo verso.

Lola Puñales se enamoró de un joven con ínfulas de torero. De ella consiguió en un principio el apuesto aprendiz, a la sazón mesero, que le pagara lo necesario para librarse del servicio militar en Cuba. Pero el joven escondía un secreto (o dos): tenía novia y algún asunto sexual, pero sin amor, con un caballero que al parecer podía ser el trampolín al ruedo. Lola se enteró de lo primero y “Corrió como loca buscando la reja en donde de otra los besos bebía” explica la canción. A María de los Dolores no le dolió apuñalarlo –a él sí-. Descargó sobre él todo el rencor fosilizado y su odio le alcanzó para morir en la cárcel de Cartagena unos años más tarde sin jamás demostrar cargo de consciencia.

La Lolita de Vladimir Nabokov

Nos vamos a Norteamérica, donde vive la Lolita más mediática, la de Vladimir Nabokov. Es un personaje de novela (considerada entre las cien más influyentes en lengua inglesa) y además se ha llevado al cine dos veces: en 1963 y en 1997. La chica norteamericana de nuestra historia se llama Dolores Haze. Nabokov escogió el nombre español pese a que Lolita, como nombre en inglés existe desde hace mucho tiempo. A esta Dolores Haze la llamaban Lo, Lolita y Dolly, lo que supongo eran muchos apelativos para una niña de doce años que vive con una viuda.

Lolita Nabokov

Lolita Nabokov

En cuanto a la relación entre los nombres Dolores y Dolly, pese a la similitud que pudiera encontrarse, su raíz es bien distinta. Dolly es un nombre escocés surgido aproximadamente en 1500, se piensa que de la palabra Doll (muñeca), mientras que Dolores es una contracción de María de los Dolores, advocación de la virgen María. Comoquiera el nombre de Dolores (en español) fue muy popular a principios del siglo XX en Estados Unidos, tanto así que en 1930 era el número 13 más usado.

Lolita… Siempre me resultó un poco malcriada y caprichosa, tanto que Humbert Humbert debía padecer una doble perversión para tener otros deseos que no fueran darle una paliza… no digo que debiera hacerlo, sólo las ganas. Pese a que la novela está contada en primera persona el narrador pasó desapercibido en el ámbito mitológico. Nada queda de él o de los otros personajes cuando se termina de leer la novela. Todo es Lolita, quien ha prestado su nombre a esas chicas de ademanes precoces y atrevidos y como se verá, toda el aura de perversión se desvaneció a causa de otros intereses. Lolita pasó de ser un símbolo de la inmoralidad para convertirse en bandera moderna de intereses mujeriles… Nos vamos a Japón.

Lolitas en Japón

En Japón era mal visto que la esposa caminara a la par de su marido en la calle. Sirva este ejemplo urbano para ambientar la situación de la mujer allí. El legado de Nabokov, ese personaje del que hoy tratamos, se dividió en dos vertientes distintas si se quiere, pero en el fondo partes del mismo fenómeno. Llaman allá Lolicon a una intención erótica en ilustraciones de anime y manga. Una especie de pornografía infantil en dibujos animados, hoy bastante controvertida y generalizada.

Lolitas en Japón, en el barrio de HarajukuLas famosas Lolitas de Japón, que se reunen los domingos den Harajuku, atraen muchos turístas y fotógrafos. (fuente: theselfishyears.com)

Lolitas en Japón.

Lolitas de Japón, que se reúnen los domingos den Harajuku, atraen muchos turistas y fotógrafos. (fuente: theselfishyears.com).

La palabra Lolicon se formó al contraer la frase Lolita complex (complejo de Lolita) término que describe la preferencia sexual por jóvenes en edad prepuberal. La frase raíz y la contracción significan dos cosas, pues el lolicon es una expresión artística que no tiene necesariamente que estar basada en un problema moral, sino en una actitud estética.

En Japón también nuestra heroína prestó su nombre a otra manifestación, en este caso de la moda. Hoy las Lolitas (personas definidas atendiendo a su manera de vestir) se han sobrado en todo el mundo hasta convertirse en una de las modas más exitosas. Surgió en Japón a causa de la falta de libertad entre las jóvenes, como un modo de expresión de sus intereses, hoy se ha seccionado tanto que sería exhaustivo para mí describir sus diferentes variantes.

La Lola de Chile

Volvamos a Latinoamérica a por nuestra heroína, adulta y fatal. La Lola de Chile. Cuenta la historia que una hermosa mujer conocida como La Lola se enamoró de un minero y con él se fue a las montañas en busca de preciosos metales. Al encontrarlos el minero pretendió gastar su parte en calientes y húmedas alcancías de carne y su mujer, un poquillo celosa, lo mandó al otro mundo, no sin cumplir el castigo legendario de la pasión.

Lola en Chile

Se volvió loca y dicen que todavía su fantasma anda por aquellos montes arrastrando el ataúd de su marido mientras busca un culpable de la muerte perpetrada por ella misma. Quienes se internan en las montañas, con un poco de suerte pueden sufrir aún que Lola los llame por su nombre y si son curiosos, sepan que de acudir a este reclamo –costumbre de sirenas- nunca regresarán, pues a la bella loca de las montañas chilenas, cualquier culpable le sirve para vengar el crimen cometido por ella.

La hora en que mataron a Lola

La expresión quien fuera presidente de Cuba, Ramón Grau San Martín, mientras daba un discurso… Miró su reloj y dijo: Coño, es la hora en que mataron a Lola, sirva para identificar un personaje harto famoso en la isla sin que nadie sepa a ciencia cierta de quién, en qué lugar ni el trasfondo de la historia.

A Lola la mataron a las 3 de la tarde, todo cubano lo sabe y deben añadir esta frase, con certeza a cualquier verificación de la nacionalidad, como aquella expresión en holandés, impronunciable correctamente por extranjeros, que se usaba durante la Segunda Guerra Mundial para identificar en ese país los espías alemanes.

¿Qué más se sabe de esta Lola? El crimen, pasional por supuesto, ocurrió en la primera mitad del siglo XX a juzgar por la vejez de las frases relativas a ella: Estás como Lola, se puede decir a una mujer bella, o si alguien se inclina se le advierte: Cuidado, así mataron a Lola… No sé más del asunto y para ser cubano con eso me basta.

Entre la década de los sesentas y la de los setentas, Bobby Salamanca hizo famosa una frase en el beisbol cubano que trascendió a la vida diaria: Adiós Lolita de mi vida, decía cada vez que narraba un juego y la bola se iba de jonrón. Así me despido de ella y de todas las mujeres fatales que reparten tropiezos.

El juego de Onetti
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