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Comentario sobre La vida y aventuras de un convicto, o el recluso de una prisión de Gloomy, de Random House.
Por fin Random House se ha hecho de lo que es tal vez el mayor descubrimiento bibliográfico en lo que va de siglo: las memorias de un preso. No se llamará así, sino La vida y aventuras de un convicto, o el recluso de una prisión de Gloomy. Este es el nombre de un manuscrito descubierto y adquirido por la Random House. Se cree que fueron las primeras memorias escritas por un afroamericano, de nombre Austin Reed, y que, el documento, fue autenticado por especialistas de la Universidad de Yale. Las memorias al parecer están fechadas en 1858 y cuenta en 304 páginas la suerte de este hombre en el periodo que va desde 1830 hasta 1850
Austin Reed nació en Rochester, como hombre libre. Fue enviado en su juventud a un reformatorio en Nueva York. Allí aprendió a leer y escribir. Luego de varios robos, con sus respectivas acusaciones, fue a parar a la cárcel de Auburn –prisión donde se ejecutó la primera sentencia de muerte por la silla eléctrica (1890)-. En el libro Reed no solo cuenta sus experiencias en prisión, sino gran parte de su vida anterior. Su primera aventura está relacionada con el intento de asesinar, disfrazado de mujer, a un hombre que lo había azotado.
Vida y aventuras de un convicto. Austin Reed.
La vida en la cárcel, hoy es mala, pero era peor tiempo atrás, cuando los métodos de rehabilitación social estaban firmemente relacionados con el castigo. Cuenta Reed los frecuentes azotes, las diez horas de trabajo diarias, la prohibición de hablar con sus compañeros. “Tras los sesenta azotes permanecí en el suelo mientras un compañero me lavaba la espalda con salmuera” Veinte años pasó en estas condiciones y se las arregló para dejar un testimonio, no solo valioso, sino que bello, según los especialistas de Yale. Es la historia de una vida dura, contada con rencor e ironía, dijo Caleb Smith, quien tendrá a su cargo la introducción de la obra publicada. El libro saldrá a la luz en un par de años.
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